El 12 de mayo se celebra el día mundial de la Enfermería, en conmemoración al nacimiento de Florence Nightingale (1820-1910), pionera en la práctica de la enfermería, a quien se considera como la madre de la enfermería moderna.
Para Naghtingale, la enfermería se definía en ayudar al paciente que sufre una enfermedad a vivir, como poder o mantener el organismo sano, es decir sin tener alguna enfermedad. Sostenía que para mantener una atención sanitaria adecuada era necesario disponer de un entorno saludable (aire puro, agua pura, alcantarillado eficaz, limpieza y luz) componentes que siguen teniendo vigencia hasta el día de hoy.
Además, celebramos en este día a todos los enfermeros y enfermeras quienes gracias a su profesionalismo, entrega y compromiso por sus pacientes, han enfrentado a los retos de la salud mundial, siendo parte importante dentro de los sistemas de salud y atención emergente.
Hoy, después de haber superado la crisis sanitaria causada por el COVID-19, es el momento de mirar hacia el futuro, tomar las lecciones aprendidas y transformarlas en conocimientos y herramientas que permitan a nuestras enfermeras y nuestros enfermeros tecnificarse, mejorar sus condiciones laborales y recibir el reconocimiento que merecen dentro del sistema de salud en el mundo.